Demencias vasculares
La demencia vascular es una de las causas más comunes de demencia junto con la Enfermedad de Alzheimer (representa el 10-20% de los casos de demencia) y la segunda causa de muerte o discapacidad permanente. No se trata de una demencia degenerativa.
¿Por qué ocurre?: este tipo de demencia es causada por lesiones cerebrales producidas por enfermedades o accidentes cerebrovasculares (ACV). Existen varios factores de riesgo que aumentan la probabilidad de que ocurra un ACV: edad, hipertensión arterial, enfermedad cardiaca, ictus previo, colesterol elevado, diabetes y tabaquismo. *En la entrada que escribí hace unas semanas sobre el accidente cerebrovascular o ictus podrás encontrar más información acerca de los tipos que existen y los factores de riesgo.
Formas de demencia vascular:
- Déficit cognitivo vascular post-enfermedad cerebrovascular:
- Infarto estratégico: se da en zonas muy importantes del encéfalo (tálamo, núcleo caudado, cápsula interna, hipocampo), se produce un cambio abrupto en la cognición o la conducta, depende de la localización de la lesión.
- Demencia multiinfarto: es típicamente cortical, se dan ataques isquémicos transitorios, infartos cerebrales o ambos. Suelen aparecer tanto infartos corticales como lesiones isquémicas subcorticales. Perfil clínico muy variado según la localización de las lesiones
- Déficit cognitivo vascular asociado con hemorragias cerebrales: afectación cognitiva difusa mayor de lo esperado por su tamaño. Las secuelas dependen de la localización de la lesión. Suelen afectar a la atención y las FFEE.
- Déficit cognitivo vascular subcortical: infarto lacunar cerebral (caracterizado por lesiones de pequeño diámetro) y lesiones isquémicas de la sustancia blanca. Suelen tener antecedentes de hipertensión arterial, diabetes, enfermedad isquémica de miocardio, tabaquismo e historia de alteraciones vasculares. Tiene un comienzo insidioso y progresivo, generalmente escalonado. Se producen alteraciones motoras subcorticales, cambios afectivos, déficits cognitivos en las FFEE.
Síntomas: los síntomas de la demencia vascular varían según la parte del cerebro afectada. Los síntomas suelen coincidir con los de otros tipos de demencia, en especial con la demencia de la enfermedad de Alzheimer. Entre los signos y síntomas de la demencia vascular se incluyen los siguientes:
- Alteraciones cognitivas: desorientación, dificultad para prestar atención y concentrarse, capacidad reducida para organizar pensamientos o acciones, disminución de la capacidad para analizar una situación, desarrollar un plan efectivo y comunicar ese plan a otros; dificultad en la toma de decisiones, problemas de memoria.
- Alteraciones conductuales y afectivas: intranquilidad y agitación, depresión y apatía; alucinaciones y delirios.
- Otros: marcha inestable, incontinencia o urgencia miccional, crisis epilépticas.
Evolución: la demencia vascular es diversa desde el punto de vista sintomático y desde el punto de vista biológico. Diferentes lesiones al cerebro, en diferentes localizaciones, pueden llevar a la demencia vascular y a su vez, manifestarse con síntomas diversos dependiendo precisamente de la localización y extensión de la lesión cerebral. Por ello, La demencia vascular presenta una sintomatología y una velocidad de progresión distinta en cada paciente.
Tratamiento: el tratamiento es similar al que ya hemos comentado en ocasiones anteriores. Terapia farmacológica (inhibidores de la colinesterasa y antagonistas de los receptores de NMDA (del glutamato)) y terapias no farmacológicas (estimulación cognitiva, fisioterapia, terapia ocupacional, tratamiento de las alteraciones de conducta, logopedia y apoyo a la familia).
¿Cómo disminuir los riesgos?
- Mantener una presión arterial saludable.
- Prevenir o controlar la diabetes
- Dejar de fumar.
- Realizar actividad física.
- Mantener el colesterol bajo control.
- Dieta saludable.